Hoy 29 de julio, celebramos el día de Santa Marta.
Hermana de Lázaro y María, el Evangelio subraya su dedicación a la vida activa, en concreto, a los menesteres hogareños. Es por eso que ha sido considerada patrona de los hosteleros y también de las amas de casa, de ahí que sea representada atendiendo a Cristo en su casa, o con elementos que aluden a tareas domésticas como una escoba o un cucharón. No obstante, a pesar de no ser muy prolífica las representaciones de esta santa, destaca la iconografía que la relaciona con una leyenda francesa de origen medieval.
Según esta tradición, la santa llegó a Aix, en la Provenza, donde rápidamente generó multitud de conversiones. Curiosamente, cerca del lugar donde se encontraba habitaba la Tarasca, una especie de dragón que tenía atemorizada a toda la población. Se cuenta que la santa supo doblegar al monstruo rociándole agua bendita y mostrándole una cruz de cañas que ella misma creó.
En este detalle que presentamos aparece la santa portando esa cruz, acompañada del acetre para el hisopo y, bajo sus pies, la Tarasca amansada, símbolo del mal replegado ante la santidad.
Detalle de Santa Marta, Retablo de la Natividad del Señor. Anónimo, escuela valenciana. Hacia 1525.